1. Al comienzo del tratamiento no es aconsejable la aplicación local de arcilla, porque ésta atrae todas las toxinas, lo que sobrecargaría más la parte afectada del cuerpo.
2. Las primeras aplicaciones tienen que realizarse con hojas de repollo crudas y
a continuación hojas de llantén que se tienen que colocar encima de una cataplasma de arcilla.
3. Si las varices son muy gruesas, tienes que aplicarte compresas húmedas de una solución hecha con corteza de encina.
Para hacer la solución tienes que mezclar 100 gr de corteza de encina en un litro de agua y llevarlo a ebullición durante 30 minutos.
4. Pasado un tiempo prudencial, ya podrás empezar a utilizar la arcilla sola en forma de cataplasma o de compresa. Las cataplasmas o compresas, frías o calientes, tienen que tener un grosor de 1 cm.
5. También puedes aplicarte baños de agua arcillosa fría en las piernas con fricción en las piernas dentro del baño, siempre siguiendo la dirección del corazón, de abajo arriba.
6. Tienes que preparar un infusión a base de mezclar a partes iguales manzanilla, cola de caballo, hojas de nogal, hojas de menta y hojas de pensamiento. Tienes que echar dos cucharadas de la mezcla por taza de agua. Debes de tomarte dos tazas diarias.
7. Otro remedio útil en el tratamiento de las varices consiste en el uso de arcilla fría tomada con la mano y esparciendo una capa uniforme sobre la pierna. La arcilla debe sostenerse por sí sola sin la ayuda de gasa alguna.Al cabo de una hora u hora y media, cuando la arcilla esté seca, tienes que retirarla y lavarte la pierna.
8. Todas las noches tienes que aplicarte compresas húmedas de decocción de hojas de llantén o corteza de encina a partes iguales con agua, dejándolo hervir 30 minutos. De esta manera tratarás las varices en las piernas.
INGREDIENTES:
- Arcilla.
- Compresas.
- Cataplasmas.
- Agua.
- Manzanilla.
- Cola de caballo.
- Hojas de nogal.
- Hojas de menta.
- Hojas de pensamiento.
- Recipiente.
